El encargado de explicar el trabajo que se ejecuta fue Adrián Echegoyen, Country Manager de Mediterránea Chile.
El recinto, que consta de 35.000 m2, es atendido por un total 100 personas que trabajan para que todos los servicios que la localización requiere estén bien atendidos. “Las características de este emplazamiento son muy particulares al encontrarse a 3.000 de altura” aseguraba el directivo, a lo que añadía que “las condiciones en invierno pueden ser muy extremas, por lo que las labores de mantenimiento, siempre importantes, lo son aún más”.
Algunos de los trabajos que Mediterránea cubre son la alimentación de los trabajadores, que trabajan y viven 7 días seguidos en las instalaciones y los 7 días siguientes descansan en sus hogares; el control de plagas, el mantenimiento de las instalaciones, información y comunicaciones para aquellos que pasan de un país a otro y otra serie de servicios como la lavandería y la gestión de basuras.
Asegurar el buen funcionamiento y las labores esenciales de este paso fronterizo es responsabilidad de Mediterránea. Lee todas las tareas que realiza la empresa en la página 12 de este documento.